Si ya soy suficientemente grande para hacer garabatos, me divertiré mucho con esto. Si no, también puedo hacerlo pero necesitaré que me ayudes. Toma dos fundas de almohada. Lo mejor es que sean blancas o de un color claro, lisas. Para dibujar en las fundas, usaremos marcadores para tela, que se consiguen en cualquier tienda de manualidades. Mamá, que está a punto de irse de misión, hará una funda para mí y yo haré una para ella. Podemos decorar las fundas de la forma en que queramos. También podemos usar pintura para tela y hacer impresiones de las manos y los pies en las fundas. Es bueno poner la fecha en las fundas para recordar cuándo hicimos estas obras maestras. No olvides tener a mano material de limpieza, como trapos, toallitas húmedas para bebés o toallas de papel, y ponme la ropa de “artista” porque es posible que me ensucie. Cuando las fundas se sequen, puedo dormir con mi funda en la almohada si ya soy suficientemente grande o podemos poner mi funda en un almohadón en mi rincón acogedor para verla cuando extrañe a mamá. Cuando mamá se vaya de misión, podrá llevarse su funda o, si no se lo permiten, podríamos guardarla en un lugar seguro hasta que volvamos a vernos.