¡Estoy creciendo tan rápido! Cuando te vayas de misión, quiero que me recuerdes, especialmente porque estoy cambiando tan rápido. Esta es una actividad de dos partes: la primera tiene lugar antes de que te vayas, y la segunda, justo antes de que regreses. Primero, tómame una foto sentado en tus piernas. Haz dos copias: una para ti y una para mí. Puedes ayudarme a “enmarcar” la foto: déjame hacer unos garabatos en un papel y después podemos poner la foto en mi marco. Debajo de mi foto, escribe la fecha, mi estatura y mi peso. Puedes poner mi copia en un marco a prueba de bebés o en una hoja protectora de plástico, de las que se consiguen en las librerías, y cerrar la parte de arriba con cinta transparente para empacar. Después puedes colgarla en la pared, en un lugar donde yo pueda verla desde la cuna o cuando estoy gateando o caminando. Puedes llevarte tu copia para recordar cuánto te quiero. Justo antes de volver a casa, otra persona grande que me quiera podría ayudarme a sacarme una foto nueva para enviártela, con un “marco” nuevo con la fecha, mi peso y mi estatura. ¡Así podrás ver cuánto he crecido y me reconocerás cuando te recibamos de vuelta en casa con los brazos abiertos! Si quieres, podrías sacarme una tercera foto sentado en tus piernas, con la fecha, mi peso y mi estatura, para mostrar que estamos juntos de nuevo. Sería bueno que siguiéramos sacando estas fotos mientras voy creciendo, especialmente porque no sabemos si tendrás que irte de viaje otra vez. De esta forma, siempre tendremos una foto actualizada de los dos juntos, que nos ayude a recordar cuánto nos queremos incluso cuando no estamos juntos.