Cuando no estás en casa, puede parecer que jugar conmigo es imposible, pero, eso ¡no es cierto! Puedes todavía jugar conmigo con tu voz o con video. Habla con la persona que me cuida y hazle saber que estarás cerca de mí cuando juego. Si llamas, cántame una canción o cuéntame un cuento. Si lo haces por video, pide que me pongan cerca de la pantalla para poder ver tu cara mientras juego con mis juguetes. Puedes nombrar objetos y elogiarme cuando alcanzo cosas.
