MFP-BT_Ideas-Setting-Limits_A

Sería bueno que supieras tres pasos fáciles para ponerme límites. 1) Interrumpe el comportamiento. Por ejemplo, tómame la mano con firmeza y dime con voz seria: “No golpees. Duele”. Es importante que seas firme pero sin enojarte. Aprendo mejor si entiendo que se trata de algo serio pero no tengo miedo. 2) Ayúdame a ponerles nombres a mis sentimientos. Eso me ayuda a entender lo que estoy sintiendo y a calmarme: “Estás muy enojado porque Paulo te quitó tu juguete. Está bien sentirse enojado, pero eso no quiere decir que le puedas pegar. No debes pegarle.  Duele”. Muéstrame una forma apropiada de expresar mis sentimientos. Muéstrame lo que puedo hacer, como saltar o patear el piso. 3) Ayúdame a resolver mi problema. Por ejemplo, ayúdame a acercarme a Paulo y pedirle que me devuelva mi juguete. Usa un reloj programable de cocina para ayudarnos a Paulo y a mí a esperar y turnarnos. Es importante que siempre tengas en cuenta cómo te sientes cuando estás conmigo. Recuerda que lo que tú sientes influye en lo que yo siento. Cuando pongas límites y más calmada estés, más fácil será para mí permanecer calmado.